Ciencia maravillosa e incomprensible

Un nuevo noviembre: Invitación

 

torta-beato 

Queridos feligreses me da gusto llegar con un nuevo sermón, en este nuevo mes de noviembre, que como siempre es muy especial para los que consideramos a noviembre… muy especial. ¿Pero qué tiene de especial noviembre que no tengan los otros meses? dirán algunos y yo me apresuro a responderles que “mucho”.

Y es que como todo en la vida cambia, noviembre no podía quedarse atrás y para mi satisfacción se renueva para traer consigo las más agradables vivencias y oportunidades. Antes, cuando yo estaba en el colegio, era el mes más esperado de todo el año, más incluso que diciembre que traía la navidad y… los regalos, pero por aquellas cosas de las vacaciones, noviembre me traía la felicidad esperada. Terminaba el año escolar en ese mes y no había alma más alegre que la mía en todo el mundo.

Los años pasaron y en ese mismo mes, obviamente, me gradué del colegio y di el paso a los chicos grandes que van a la universidad. Empezaba a labrarme mi futuro y ese mes me abrió la puerta para respirar profundo e incursionar en los terrenos filosóficos y decirme –por primera vez- con toda seguridad: “y… ahora… ¿qué carajos hago?” Pero fui feliz y tuve grandes momentos en ese mes. La fiesta de grado, los regalos que llegaron con la fiesta y el grado, y hasta una embarrada de padre y señor mío, se volvió en una de las más grandes enseñanzas que he recibido. Se las cuento. Resulta que un primo de mi padre, llamado Alvaro, me regaló un juego elegantísimo de Parker, una estilográfica y un lapicero. Relucía el oro y sus tapas imponentes contrastaban contra el fondo del estuche forrado de terciopelo negro. Quizás el regalo más elegante que haya recibido en mi vida. Resulta que a los dos días mi padre me preguntó si lo había llamado para agradecer el regalote. Yo le dije que no y prácticamente me arrastró al teléfono. Yo, todo serio y muy enfundado en mis 18 años, de HOMBRE –así con mayúsculas, porque ya había terminado mi bachillerato y andaba camino a la universidad como todo un grande- le digo con mi mejor voz de tenor: “Alvaro, te llamo a darte las gracias, estoy muy agradecido con la bobadita que me regalaste…! Lo único que recuerdo de ese día no más terminé esa frase, fue el bate de beisbol que venía directo a mi cabeza y con el que mi padre había estado jugando conmigo cuando me hizo llamar a Alvarito.

Después, también un noviembre fue cuando me asignaron mi propio claustro en el seminario. Ya podía dormir sólo y sin temores. Sin temores digo, porque siempre tuve miedo de hacer ruidos o cosas sin querer que pudieran despertar a mi vecino. No piensen mal, digo ruidos y cosas, como cuando me atacaba el desvelo, prendía la luz para leer la Biblia y generalmente tropezaba con la copita de vino que me acompañaba desde la mesa de noche. Ya saben, cosas de seminarista que aspira a llegar muy lejos.

Podría enumerar todos los vienticinco noviembres –que hasta parecen más de cincuenta- que he vivido durante mi vida, pero necesitaría más sermones para contarles cada cosa, así que saltaré rápidamente al año en que una amiga finalmente me dio el número telefónico de la Secre a cambio de 24 cajitas de vino para consagrar en cajita y sorprenderla en su cumpleaños. Lo bueno de todo es que yo estaba en Chile y mi amigota no me dijo que no debía marcar desde allá el cero que acompañaba los siguientes 20 números. Aunque no pude felicitarla, me quedó el sabor dulce de haberlo intentado. ¿Y mi amiga? pues nunca le dije que el vino ya era vinagre. ¡Me imagino cuántas ensaladas habrá preparado con 24 litros!

También un noviembre se empezó a cristalizar el primer encuentro de amigos de Internet. Llevábamos 8 años escribiendo en el mismo grupo de MSN, nos conocíamos la vida de todos y nos queríamos como una gran familia internacional, y ese mes decidimos encontrarnos en Buenos Aires. Como 15 personas dimos el salto de la virtualidad a la realidad. Se hicieron los planes, decidimos y finalmente nos encontramos en enero, pero fue en noviembre cuando se decidió que en nuestras vidas, nada iba a ser igual después de abrazarnos.

Un noviembre del año que no diré, por motivos de seguridad y ganas de vivir cuarenta años más, nació en Pergamino una gran amiga, mi mejor amiga y a quién la vida me hizo esperar cincuenta años para encontrarla: La Secre. Un 4 de noviembre, Pergamino vio la luz al sentirse iluminada con tan esplendorosa mujer. Este mes, el día cinco, celebraremos en los Silos, a orillas del río Paraná el cumpleaños de la Secre y de María Susana -nuestra gran amiga de Spaces, que cumple el primero - con una cena que seguro será inolvidable, por algo será nuevamente en un hermoso mes de noviembre. Están todos invitados, los rosarinos y rosarinas y los que no lo sean también, podrán acompañarnos a apagar unas cuantas velitas, porque la torta llevará las velas de las dos juntas je, je, necesitamos ayuda para soplar, así que por favor no dejen de acompañarnos. Por correo les diré exactamente el lugar exacto a quienes quieran llevar sus regalos –voluntarios, eso sí- ya que Roma no me permite hacer publicidad en los sermones.

Bendiciones de noviembre para todos.

                     jomonk2

Safe Creative #0910314802705

Comentarios

  1. Qué bonito lo cuentas Cardenal. Da gusto imaginar los noviembres como en este lado del planeta los meses de junio.

    Yo no podré asistir, pero igual les deseo muchas felicidades a los dos. A Sandra por cumplir un año más y a ti por acompañarla. Y a María Susana no la conozco, pero igual le deseo feliz cumpleaños.

    Abrazos a repartir.

    ResponderEliminar
  2. Siempre es un placer leerte, Carde!
    Ni te imaginas la alegría q me diste con tu mensaje contandome q estaban reunidos!!! Y no sabés con cuantas ganas iría para celebrar los cumples de Sandra y MSU!
    Les mando como siempre mi cariño, el agradecimiento por recibirme con el corazon abierto, y el recuerdo de un par de personitas que se quedaron en mi corazon! BESOTES!!!

    ResponderEliminar
  3. jejeej hermosa manera de rememorar tus noviembres, Carde!(cuando leí tu falta de miedos en tus primeras noches de seminarista estuve tentada de hacer cierto comentario en relación aciertos religiosos efebófilos -como gustan llamarse- pero opté por callármelo para evitar susceptibilidades! jejejeej

    Aprovecho para mandarle un feliz cumple a la Secre. Circunstancias personales que creo haber ya comentado me impedirán sumarme al festejo, pero los acompañaré virtualmente a la distancia!

    Que lo pases lindo

    ResponderEliminar
  4. Pues el vinagre de vino de misa debe ser algo así como el de Módena...de lo más balsámico. Te debe estar eternamente agradecida por el regalo...
    Aquí, noviembre no es final de curso...Llevábamos ya dos meses y no veíamos el final ni con telescopio. Tenía de bueno que comíamos castañas y "panellets". Pero ahora, por obra y gracia de los yankees te pegan cada susto por la calle, que no veas.
    Un besote (casto y de paz, claro) bien gordo a la Secre de mi parte. Un abrazo: Joan Josep

    ResponderEliminar
  5. cre0 haber dich0 enalguna 0casi0n al señ0r cura 0 a la señ0ra secre que mi salt0 a bl0gger se debi0 a amb0s...ah0re ve0 un salt0 para ir a...un cumple...mira, d0n carde,0s pr0p0ng0 una c0sa:
    vezdemarban, siti0 ardu0 dificil de pr0nunciar y casi de enclavar en mapa algun0 de estas españas queda asi c0m0 mierand0 d efrente el mapa de españa ...sí, bien a la 0zquierda y arriba...se debe de decir tres veces el n0mbre y segur0 que este puebl0 de bar0 y mas barr0 y de 0lvid0 y...aparece...pues ¿acas0 n0 p0dria ustades altar el charc0 y celebrarl0 aca?
    mas que nada p0r que asi mi rega0 es segur0 que llegaria para esas d0s de las velas
    ah, un0 de ellas se la edad que tiene
    la secre
    p0see la edad
    ja que si l0 dig0 y aciert0,sere n0mbrad0 adivin0000¡
    salud0s

    ResponderEliminar
  6. Agradeciéndoles, como siempre, sus atentos mensajes, sus visitas, sus palabras y depósitos en la famosa cajita, regreso a enviarles un pedazo de torta y helado que compramos para ese día del festejo.

    Todos muy gentiles y queridos, como siempre, y me permito recordarles que los regalos pueden ser remitidos por correo certificado ya que no quisiéramos que tan alta inversión que ustedes hagan se pudiera perder en el trayecto a la parroquia.

    Como siempre, bendiciones a todos y muchos, muchísimos calurosos saludos llenas de felicidad.

    ResponderEliminar
  7. Espero que el resto de tus noviembres sigan siendo igual de dulces ; ) claro que empezando con el cumple de alguien tan maravilloso como la Secre, es fácil no? Mis más sinceras y cariñosas felicitaciones que aunque sea en la distancia habrá un brindis ese día a su salud. Se me cuidan yaaaaaa! Un más que abrazo : )

    ResponderEliminar
  8. Un placer haberte leído en esta tarde oscura y lluviosa de noviembre.
    ¡Ah! a propo Noviembre...mi hermano y su esposa cumple años en este mes el día 12. Gran casualidad. Así que mato dos pájaros de un tiro. Ja!
    Recibe un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar
  9. Ave maría purísima!

    Vaya, parece que el mes de noviembre tiene algo especial! Aquí en mi casa ocurre lo mismo con ese mes! Mi padres se conocieron en noviembre, se casaron en noviembre, y además, mi padre nació hoy mismo, 4 de noviembre, como la Secre!!!

    Así que siento mucho no poder enviarle a usted una cajita de vinos por las celebraciones porque nos las vamos a beber aquí, jajajajaja!
    Otra vez será...

    Felicidades por tooooooodo, en especial para Sandra.
    Muakkss!

    Y perdóneme, padre, porque he pecado...


    Lala

    ResponderEliminar
  10. Pues mire, Cardenal, a mí noviembre no me era especialmente simpático... porque empieza el frío de verdad por éstas montañas y porque empiezo a vislumbrar un nuevo cumpleaños... pero después de leer su entrada, creo que le voy a coger (aigs, no, que en Argentina no se puede decir coger...) a ver, rectifico... creo que le voy a tener más cariño.
    Aunque no tanto como a Ud. y su querida Secre, a la que me felicita también de mi parte, por si no ve el mensaje que le dejé en su blog.
    Le iba a regalar a la Secre un viajecito a España por su cumple... pero mi economía no colabora,¡la muy insolidaria! así que les dejo algo en la cajita de limosnas... a ver si hay suerte y se produce el milagro de la multiplicación espontánea. Bueno... ya pasó una vez con los panes y los peces, ¿no?
    Castos y puros besos.

    ResponderEliminar
  11. Hola Carde:
    ¡Qué lindo mes para cumplir años!
    Mi hermana los cumplía el 17 y para mí era un día super especial. Lo sigue siendo, pero de otra manera.
    Me alegra saber que Sandra es de este mes. Sabés que en ustedes deposité algo del cariño que se me fue acumulando desde hace algunos noviembres y que leyéndolos, lograron dibujar muchas sonrisas en momentos que escaseaban.
    Gracias por este mes y los anteriores compartidos.
    SUsana

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Deja tu confesión